martes, 29 de junio de 2010

En el bar


A menudo me acuerdo de personas que siendo clientes del bar, eran no sólo conocidos sino amigos y algunos eran como familiares en no sabes qué grado. Aunque un señor que iba de paso me dejó un muy buen recuerdo. Normalmente cuando salía del cole iba al bar, merendaba y me ponía a dibujar. Tendría unos siete años cuando una tarde de esas oscuras de invierno, un señor me vio dibujando en una mesa pequeña de madera en el lateral que da a la fransa con un boli bic azul en mi libreta granate de espiral con hojas cuadriculadas, todo bastante cutre y me dijo: ¿sabes dibujar un caballo? le dije que no con la cabeza, y con toda la naturalidad del mundo dibujó un caballo, no, me enseñó a dibujar un caballo, encajándolo mediante círculos uno al lado del otro de diferentes tamaños,"¿lo ves?" y yo haciendo que sí con la cabeza, joooder! hasta entonces solo había hecho garabatos infantiles de cosas que me imaginaba, ahora podía dibujar cosas de verdad.
Como aquel señor estuvo un tiempo por el barrio me enseñó a dibujar figuras humanas, de hecho dibujaba una especie de arlequines, era el director del circo de los muchachos.
El Joan Rusiñol, el Juan del borne, era un señor un poco animal pero muy simpático que te encontrabas de buena mañana en el bar; venía de trabajar en mercabarna y antes de ir a dormir pasaba un rato por allí con unas cuantas verduras que "li havia de portar a la Susana". A su hijo, el Joanet, li deien "el nen" y pequeño del todo no era.
Seguramente aprendí a atarme los zapatos en casa pero a entender las horas en un reloj de agujas me enseñó el señor Roque en la mesa de mármol del fondo.
Mis hermanos seguro que se acuerdan más que yo del "Dotor" como se hacia llamar, Castelo tenía su oficina en el bar, su mujer la Rufi siempre estaba cerca, se dedicaba a sus negocios entre los que estaban la compra-venta de coches, una vez le dio a mi padre una rueda vieja que parecía estar en buen estado, mi padre la montó detrás en el R5 verde, segundo coche que tuvo tras al menos quince años con el 600 color café con leche, y un dia de verano yendo a la playa a Lloret reventó en plena autopista del mediterráneo, el coche fue dando bandazos hasta que mi padre pudo controlarlo, lo paró en donde tenía que haber mediana y por suerte en aquel tramo había césped. Del susto que llevaba no podía ni cambiar la rueda y... nada, ya nos ves a mi prima Ani y a mí con unos doce años cambiando la rueda. Ah! en todo el rato no apareció ni la guardia civil, ni el racc ni nada parecido, otros tiempos.
Al pobre Castelo le supo muy mal, pero como decía, sus negocios no acababan ahí; mis hermanos habían trabajado con él de acomodadores en el festival de cine, también habían sido taquilleros, yo sólo cogí su última época y en verano iba con César a hacer de portero y colocar las sillas a los conciertos de juventudes musicales que se celebraban en el Hospital de la Santa Creu, donde hacían de taquilleros el Josep Bohigas, el arquitecto del nuevo Molino y su hermana Berta.
También me acuerdo del "Siscu" de la vanguardia, Francisco Alucha inspector de la vanguardia, un señor con el que me encantaba charlar.
No quiero enrollarme mucho más pero es que me viene el señor Vigert Roqueta, comerciante de calzado y músico, una vez fuimos a verlo a Sitges con mis padres, nos enseñó el pueblo y luego insistió mucho en ir a ver el centvintiset, no era un coche, era su nicho. "Oi que estaré bé aquí Anita? davant del mar?" cuando bastantes años después cayó enfermo i veía que su dia estaba cerca, cada mañana se hacía el muerto, así entrenó a su mujer hasta que un dia fue verdad.
Mucha gente que conocemos todavía vive en el barrio y volver a pensar en el pichi me alegra, me hace ilusión reformarlo, adecuarlo a los tiempos que vivimos y proyectarlo hacia el futuro pero recordando lo que ha sido.
El siguiente tema será el palau dels esports del carrer lleida, el palacio. Me gustaría hablar de los circos que venían, del hockey del barça, del indoor solomoto, de los conciertos... pero antes me informaré de por qué el edificio está orientado con la fachada principal en el lado del circuito, cosa que siempre quise saber y nunca me atreví a preguntar...

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